EROTISMO, ¿HABLAMOS DE LO MISMO?
Y perdonad el pareado. Llevo tiempo dándole vueltas a esta entrada y, quizá, la noticia de que una conocida página web dedicada a la romántica ha decidido negarse a subir novedades editoriales que consideren «erótica a secas» ni reseñas de las mismas es lo que me ha decidido a escribirla, por fin. Yo, ante todo, soy partidaria de la libertad: de la libertad del RNR de hablar en su web de lo que les apetezca, de la libertad de los autores de escribir lo que quieren, de las editoriales de publicar lo que consideran que vende más y de l@s lector@s de leer lo que les dé la gana. A partir de ahí, creo que va a resultar difícil trazar los límites entre romántica-erótica y erótica a secas.
Confieso que no soy lectora habitual de este tipo de literatura, pero hace unos días leí Everything Forbidden de Jess Michaels, una novela de regencia clasificada como erótica (en España casi seguro que la considerarían romántica sin más), y me asaltó una duda existencial: ¿no nos estamos equivocando de debate? ¿No deberíamos preguntarnos, tal vez, si está bien definida la novela erótica como erótica? A lo mejor deberíamos hablar, simplemente, de novelas con mucho sexo y todo quedaría más claro.
No voy a entrar en si una jovencita soltera y virgen ― una época, principios del s.XIX, en la que no podían salir si no iban debidamente acompañadas por una carabina, y donde cualquier mancha en la reputación suponía una condena al ostracismo social, cuando no eran encerradas de por vida en el interior de sus hogares―, puede acudir sola a la mansión (una mansión, para más inri, en la que hay dos criados por metro cuadrado) de un hombre soltero y perder su virginidad en coma dos segundos en el sofá del salón. Está bien, pongamos que me lo creo, pero no, no es eso lo que me interesa; lo que en realidad quiero saber es:
¿Qué significa erotismo?
Según el DRAE:
1. m. Amor sensual.
2. m. Carácter de lo que excita el amor sensual.
3. m. Exaltación del amor físico en el arte.
Así que decido buscar también:
1. adj. Perteneciente o relativo a las sensaciones de los sentidos.
2. adj. Se dice de los gustos y deleites de los sentidos, de las cosas que los incitan o satisfacen y de las personas aficionadas a ellos.
3. adj. Perteneciente o relativo al deseo sexual.
Y me digo que, tal y como pensaba, aunque, como indica la tercera definición, puede referirse a ello, erotismo no es solo lo relativo al deseo sexual, sino que va más allá y engloba a todos los demás sentidos.
En el libro al que me he referido antes, y hablo de este como podría referirme a otros muchos, había un montón de escenas de alto contenido sexual (tantas, que acabé pasando páginas para seguir con el resto de la historia), pero ¿de verdad estamos hablando de escenas eróticas?
Yo creo que una combinación de notas musicales, un bocado de algo exquisito, un aroma que te llega de pronto... pueden convertirse en algo realmente erótico. Entonces, ¿por qué en la literatura hemos reducido lo erótico a lo simplemente genital? ¿Por qué no dejamos más espacio a la imaginación; al órgano sexual por excelencia: el cerebro?
En muchas de esas escenas, además de un lenguaje casi científico ―clítoris, vagina, pene, glande―, cuando no directamente vulgar ―polla y derivados―, podemos apreciar hasta lo imposible el grado de apertura, humedad, tamaño, grosor, de vellosidad o no de los órganos reproductivos, masculinos y femeninos, mientras los protagonistas se contorsionan en todo tipo de posturas más o menos acrobáticas. En resumen, son como primeros planos de una peli porno.
Y en ese momento me vienen a la cabeza escenas como la de la película Orgullo y prejuicio de Joe Wright ―cuando Mr. Darcy ayuda a Elisabeth a subirse a la carroza y mientras se aleja hay un primer plano de su mano, que se abre y se cierra como si le hubiera dado un calambre― que me hizo recurrir al abanico; o aquella otra de El Piano de Jane Campion ―George Baines (Harvey Keitel) descubre un agujero en la media de Ada (Holly Hunter) y mete su dedo en él―, que me puso cardiaca.
En ambos casos, se trata de una simple sugerencia o esbozo de algo que hace que te suban las pulsaciones de cero a cien en un nanosegundo, y es entonces cuando me digo:
¡Señores, eso sí que es erotismo!
Isabel Keats
Totalmente de acuerdo contigo, Isabel. Ya empezaba a pensar que yo era un bicho raro en esto del concepto de erotismo!! Maravillosa entrada. Espero leer más artículos como este, porque creo que el erotismo en la novela romántica se está desprestigiando mucho. El por qué, no lo sé, aunque seguro que si nos ponemos a pensar, a alguna conclusión llegaremos... Besos!!
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo.A veces se pasan con las escenas de sexo,cuando es mejor que sugieran como dices como la escena de Orgullo y prejuicio que a mi tambien me encanto me parece muy romantica y sugerente
ResponderEliminarQué entrada más interesante, Isabel, estoy cien por ciento de acuerdo contigo, me ha provocado un tremendo alivio ver mis pensamientos plasmados con tanta claridad. Me permito sumar una escena que recrea de forma perfecta lo que considero erotismo; en Stoker, una película fabulosa, los protagonistas sentados frente al piano, tocando a cuatro manos, ni siquiera se tocan en realidad, pero hay una corriente eléctrica impresionante entre ellos, de lo más erótico que he visto en mi vida.
ResponderEliminarBesos.
Supongo que las llamamos eróticas porque llamarlas pornográficas quedaría demasiado burdo y poco femenino... hipocresía total, porque son lo que son. Aunque por esa regla de tres, cualquier novela romántica sería erótica per se, ya que en ellas se juega con la atracción y los sentidos de los protagonistas.
ResponderEliminarEs un tema bastante controvertido, la verdad. Como dice D.W. Nichols, desde ese punto de vista cualquier novela romántica podría considerarse erótica y yo creo que no es así. Una calentura te da con un perfecto roce de manos o con una buena escena de sexo, la diferencia entre lo común o lo pornográfico y lo erótico estriba, creo yo, en la forma de narrarlo, en la manera de describir la escena.
ResponderEliminarHa sido una entrada genial, Isabel.
Gracias!
Una genial entrada!!! El erotismo y el sexo van de la mano pero no todo el sexo es erótico. Gracias!!!
ResponderEliminarYo creo que el llamado erotismo ha decaído desde que salió 50 Sombras, algunas se han aprovechado del boom y han aumentado las escenas de sexo en sus historias.
ResponderEliminarY concuerdo con Nichols, se las llama eroticas por no llamarlas pornograficas.
Se haria falta un analisis de las novelas mas vendidas, entre las que tengan escenas de sexo vulgar, y las que tienen el erotismo del estilo Orgullo y Prejuicio
Pues estoy de acuerdo. Es una pena que el erotismo que hay en las novelas románticas se mezcle con el sexo "vulgar" que se describen últimamente en algunas novelas. Yo no suelo leer erótica aunque me gustó 59 sombras. Pero de ahí a que ahora aprovechen el boom y todo sea igual... Yo prefiero el erotismo como el que has dicho, de orgullo y prejuicio sin duda. Una novelas no tiene que tener escenas tan descriptivas rozando lo vulgar para que nos enganche y sea buena...al menos en mi opinión.
ResponderEliminarSe me fue el número con el 59 jejeje es 50 sombras. Perdón ;-p
EliminarMuy bien planteado el articulo! Yo empecé el verano pasado a leer mas intensamente este tipo de novelas,tanto romantico erótica como romántica a secas,y puedo decir que ya me lei algo mas de 300!! Me gustaría encontar un grupo de face o blog donde hacer recomendaciones y hablar con las personas mas cercanamente...
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